Alguien ha dicho que la muerte es el último Amén de esta vida y el primer Aleluya de la nueva vida. Esta frase para el cristiano es una verdad y, sobre todo, una realidad. El cristiano sabe que es un peregrino que camina hacia una meta definitiva. A todos nos gustaría que la vida fuese para siempre, eterna; sin fin. En el fondo ese deseo es el que nos mueve y nos da ilusión y esperanza en esta vida.
Y nuestra fe cristiana nos viene a asegurar que tenemos toda la razón en desear que la vida no acabe, que sea eterna. Pero, al mismo tiempo, nos dice también la fe que la vida esta en dos etapas: esta que vivimos en la tierra y la que continúa después de la muerte en el cielo.
Por eso la muerte es el último Amén y el primer Aleluya. Es como cerrar una puerta para abrir la otra. Es como pasar de una sala a otra para seguir viviendo ya para siempre.
Es cierto que no queremos morir, que nos entristece y produce dolor. Y es natural, es humano. También el mismo Jesús sintió miedo ante la muerte. Nos hemos ido acostumbrando a esta vida. Con los años nos vamos apegando a muchas cosas, sentimos cariño de muchas personas. Por eso nos cuesta despegarnos de las personas que amamos y nos aman y de todo lo que hemos conseguido.
Lo que no vemos es lo que alcanzamos y recibimos después de la muerte. La Biblia. la Palabra de Dios, nos dice que no tiene comparación: que es mucho mejor lo que recibimos que todo lo que dejamos.
El dìa de hoy Natividad Carrillo Quintero, doña Naty, se adelantó en este peregrinar, queremos enviarles a todos sus hijos, nietos y familiares en general, vecinos de todos nosotros un fuerte y sincero abrazo de amistad y apoyo en estos momentos.
El empuje que Doña Naty mostró para tratar de resolver los problemas de la comunidad que la rodeaba es algo que todos debemos de aquilatar, recordar y tratar de imitar en la medida que cada uno de nosotros podamos.
Descanse en Paz.
Sin duda la extrañaremos... fue una mujer fuerte, trabajadora, que brindaba su ayuda a quien lo necesitara... luchadora social incansable, que ayudo a muchas personas, sobre todo a las mas vulnerables y necesitadas a las que apoyaba siempre, supo cultivar muchas amistades y también se ganó la crítica y hasta el repudio de muchos "un hueso duro de roer" directa al punto que sus opiniones podían molestar, un ser humano con muchas aristas sin duda, pero que quienes estuvimos cerca de ella supimos apreciar y querer... "Doña Naty" deja un legado de trabajo y servicio invaluable, y por supuesto un gran dolor por su ausencia física en su familia, para ellos un abrazo fraterno y que Dios les brinde pronta resignación... Descanse en Paz
ResponderEliminarDOÑA NATY: NOS DEJAS UN GRAN DOLOR CON TU PARTIDAD, PERO TAMBIEN ME QUEDO CON UN GRAN CARIÑO.
ResponderEliminarTU RECUERDO SIGUE VIVO EN MI CORAZON.
DESCANSE EN PAZ.
Hablar de doña naty es hablar de lucha, inquietud, iniciativa, fuerza, coraje, etc. etc....que como ser humano con sus defectos y virtudes nos van dejando un legado muy importante, la enseñanza para los que nos quedamos a seguir luchando por esta vida, hablar de esta viejita necia es hablar de una lucha incansable por mejorar su entorno y ayudar a los que buscamos mejorar nuestro alrededor, yo en lo particular me quedo con una gran enseñanza, y cuando todo parecia calma decia....jose luis estamos muy arranados....esto quería decir que era hora de tomar las armas e iniciar una nueva lucha para mejorar nuestra colonia...
ResponderEliminarpero lo que yo mas he admirado y seguire admirando es la lucha incansable por sus hijos....una madre luchona, como pocas por jalarlos a seguir adelante verdad mi amigo jose alfredo.....verdad mi amiga trini....gracias por habernos compartido a ese viejita necia que la llevaremos en nuestro corazon y vivirá ahi a lo largo de toda nuestra vida....descanse en paz nuestra gran guerrera....